«El Señor lo destruyó todo y ninguna de las casas de Jacob quedó en pie. En su ira destruyó las fortalezas de la hija de Judá. Hizo que Judá se derrumbara e hirió a su reino y a sus príncipes.»
Lamentaciones 2:2 PDT
Dios puede destruir todo aquello en lo cual estoy depositando mi confianza que no sea Él, y de seguro lo hará porque Su deseo es que dependa por completo de El en humildad para todo y para Su gloria.
Completa dependencia